Graciela Cejas, fundadora de este barrio de la ciudad, refiere a las gestiones para concretar diferentes obras en ese sector de Goya, anticipando los trabajos en el marco del Programa “mita y mita”. “Estas obras enaltecen a los vecinos y mejoran la calidad del barrio” afirmó.
MITA Y MITA
La vecina contó: “Con este programa trabajando con la Municipalidad, en calle Mandisovi nos permite mejorar las condiciones de los vecinos, nuestra calidad de vida. Para la adquisición de los materiales hemos hecho distintos beneficios, rifas, pollos y otras actividades con una gran colaboración de los vecinos de “mi barrio” y de los barrios cercanos”.
LOS INICIOS DEL BARRIO
Cejas, más adelante reseñó: “En una reunión del Plenario nos plantearon la posibilidad de conformar la comisión del barrio, en ese momento necesitábamos apertura de calles, luz, pocas construcciones, instalar cruces de calle, agua, iniciamos entonces nuestro consejo vecinal con la ayuda del intendente (Osella). Doce años estuve al frente de la comisión barrial; en ese comienzo el intendente era Ignacio Osella. Durante los dos mandatos de Ignacio (Osella) hemos tenido un permanente acompañamiento, después vino la gestión del profesor Bassi (Gerardo), donde solicitamos los servicios de limpieza, cuneteo, esas cosas que ayudan a mantener las condiciones adecuadas en nuestro barrio”.
“Después ingresaron máquinas para la apertura de calles -agregó-, me invitaron a buscar los nombres de esas nuevas arterias. Siempre tuvimos un empuje haciendo distintas actividades para llegar a los resultados, nuestro barrio ha crecido, es un hermoso espacio, tenemos luz, agua potable, cloaca, siempre estamos gestionando obras que mejoren nuestras condiciones.
CALLE MANDISOVI DEMANDÓ LA COMPRA DE 360 BOLSAS DE CEMENTO
La vecina sostuvo: “La calle Mandisovi es la que estamos concretando con el programa “Mita y Mita”. 360 bolsas de cemento adquirimos para esta calle”.
“Uno siempre quiere que todos se sumen, porque todos estos beneficios son para cada uno de nosotros que vivimos en el barrio. El esfuerzo tiene su recompensa, de allí nuestro apoyo y colaboración a nuestro actual presidente del consejo vecinal. Cuando crece el barrio, las obras enaltecen a cada vecino; hace más de 30 años que estoy radicada en Goya, me instalé en una casa precaria (rancho), hoy tengo mi vivienda de material y esto, reitero, enaltece a cada uno de nosotros…”.